La conexión entre psicología y ley: Psicología jurídica y forense

¿Sabías qué la psicología ha sido usada para resolver crímenes desde hace siglos? 

A pesar de que la psicología jurídica y forense son campos de estudio relativamente nuevos. En la antigua China los emperadores llegaban a consultar con expertos en la “ciencia de la mente” para que pudieran analizar las confesiones de los acusados y evaluar su estado mental. Asimismo, en la Europa medieval, los médicos legistas evaluaban la cordura de los acusados de brujería. 

La psicología y el sistema legal llegan a vincularse a través del hecho de que ambas tratan con personas y sus conductas. La psicología jurídica y la psicología forense utilizan los conocimientos y técnicas psicológicas para abordar cuestiones dentro del sistema legal.  Por ejemplo, al momento de entender el comportamiento de una persona que cometió un crimen, asesorar a un juez sobre temas de salud mental, contener emocionalmente a una persona que ha sido víctima de un delito, evaluar la condición de salud mental de los acusados al momento de tomar decisiones o reincorporar a las personas involucradas dentro de la sociedad con mejores herramientas de vida, entre otras. 

Las dos disciplinas tienen un rol crucial dentro de la justicia y el bienestar de las personas que están involucradas. Es por ello que a continuación se explicará en qué consiste cada una de estas, en dónde tienen un impacto más relevante, cuáles son sus diferencias o incluso retos al momento de ejercerlas.

¿Qué es la psicología jurídica y forense?

Acorde con Garrido, V (2023) la psicología jurídica y forense son disciplinas que se pueden llegar a relacionar con el sistema legal y la salud mental. Sin embargo, llega a ser bueno saber cómo se pueden diferenciar en cuánto a sus objetivos y lo que cada una aporta.

Psicología jurídica

La psicología jurídica es una disciplina fascinante que surge del cruce entre la psicología general y la criminología. Su objetivo principal es brindar soluciones a problemas jurídicos a través de métodos psicológicos, con el fin de mejorar la justicia y el bienestar de los individuos que se involucran en el ámbito legal. 

Por ejemplo, al evaluar la capacidad mental de personas que están siendo acusadas, analizar y comprender causas y consecuencias de sus actos, al momento de elegir al jurado, dar una testificación, entre otras.

¿En qué consiste la psicología jurídica?

En esencia, la psicología jurídica aplica los conocimientos de la psicología y la conducta humana para comprender y evaluar diversos aspectos dentro del sistema legal. Algunas de sus aplicaciones más comunes incluyen:

  • Evaluación de la capacidad mental: Se determina si un individuo acusado posee la capacidad mental necesaria para comprender los cargos que se le imputan y participar activamente en su proceso legal.
  • Análisis de las causas y consecuencias del comportamiento: Se estudia en profundidad las motivaciones y factores psicológicos que influyen en las acciones de las personas involucradas en un caso legal.
  • Selección del jurado: Se evalúan las características psicológicas de los potenciales miembros del jurado para garantizar un proceso imparcial y justo.

Testimonios: Se asesora a los testigos sobre cómo brindar un testimonio claro, preciso y confiable durante un juicio.

¿En qué áreas se desarrolla la psicología jurídica?

La psicología jurídica tiene un amplio campo de aplicación, abarcando diversas áreas del sistema legal:

Psicología Penitenciaria: Se enfoca en la evaluación, tratamiento y rehabilitación de las personas privadas de libertad.

Psicología de fuerzas armadas y policiales: Brinda apoyo psicológico a los miembros de las fuerzas armadas y policiales, abordando temas como el estrés, la ansiedad y el trauma.

Familiar y civil: Interviene en casos de divorcios, custodia de menores, adopción y otros asuntos relacionados con la familia y la sociedad civil.

Psicología aplicada a los juzgados sociales: Se especializa en la evaluación de casos relacionados con menores de edad, personas con discapacidad y situaciones de vulnerabilidad social.

Jurídica penal: Se centra en la investigación y análisis del comportamiento criminal, la evaluación de riesgos y la elaboración de perfiles criminológicos.

Psicología Forense

La psicología forense se presenta como una rama de la psicología jurídica, que se encarga de reunir y analizar datos psicológicos relevantes en casos penales o civiles. Su objetivo principal es comprender la conducta humana y brindar información valiosa al sistema de justicia. 

¿En qué consiste la psicología forense?

  • Un campo especializado: A través de evaluaciones periciales y psicológicas detalladas, la psicología forense examina a las personas acusadas para determinar su estado mental al momento del delito. Esta información resulta crucial para emitir un veredicto justo en el caso.
  • Más allá del veredicto: La psicología forense no solo se limita a la evaluación de los acusados. También busca comprender y analizar los aspectos psicológicos de todas las partes involucradas en un proceso legal, incluyendo víctimas, testigos y jurados.
  • Aportes a la justicia: Con base en el conocimiento y las evidencias psicológicas, la psicología forense contribuye a la toma de decisiones legales más informadas y justas. Además, busca promover el bienestar y la rehabilitación de las personas involucradas en el proceso judicial.

Aportes a detalle de la psicología forense al sistema de justicia:

  • Evaluación de la competencia para ser juzgado: Se determina si el acusado comprende los cargos en su contra y si puede participar activamente en su propio juicio.
  • Evaluación del estado mental: Se analiza si el acusado padecía de alguna enfermedad mental que pudo haber afectado su capacidad de actuar o comprender la naturaleza del delito.
  • Evaluación de la credibilidad de los testigos: Se evalúa la confiabilidad de los testimonios de las personas que presenciaron un hecho delictivo.
  • Asesoramiento a jueces y tribunales: Se proporciona información psicológica especializada para ayudar a los jueces y tribunales a tomar decisiones informadas.
  • Elaboración de perfiles criminológicos: Se crean perfiles psicológicos de los delincuentes para ayudar a identificarlos y prevenir futuros delitos.

Intervención en la rehabilitación de delincuentes: Se diseñan e implementan programas de rehabilitación para ayudar a los delincuentes a reintegrarse a la sociedad de manera segura y productiva.

En resumen, la principal diferencia entre las dos es que la psicología jurídica es un campo más amplio que abarca diversas áreas relacionadas con la ley y la psicología. Mientras que la psicología forense se enfoca principalmente en el aspecto de evaluación y testificación dentro del sistema legal.

Importancia de estas psicologías

Nos podemos percatar de que tanto la psicología jurídica, como la psicología forense son fundamentales en los procesos legales, en donde se necesita la perspectiva y conocimientos de la psicología.

La importancia de un psicólogo jurídico está en los siguientes ámbitos:

  • Protección del bienestar infantil: En casos de custodia y tutela de menores, en donde evalúan el entorno familiar para recomendar lo mejor para el o los niños.
  • Mediación y resolución de conflictos: Ayudan a facilitar la comunicación y el entendimiento entre las partes involucradas, evitando los juicios prolongados.
  • Apoyo a víctimas y testigos: Ayudan a personas que fueron víctimas de diversos traumas para sobrellevar los procesos legales, proporcionando apoyo emocional. 
  • Formación y desarrollo: Proporcionan capacitación y recursos a profesionales legales para mejorar la comprensión del comportamiento humano y reducir el riesgo de conflictos.
  • Evaluación de competencias legales: Evalúan la competencia de individuos para tomar decisiones legales, como su capacidad para firmar contratos o actuar como testigos.

La importancia de un psicólogo forense está en los siguientes ámbitos:

  • Evaluaciones periciales: Proporcionan evaluaciones especializadas para casos legales, como la evaluación de la competencia para ser juzgado, la responsabilidad penal, y la salud mental.
  • Testimonios expertos: Pueden actuar como testigos expertos en tribunales, donde brindan claridad en el comportamiento criminal, las capacidades cognitivas y la evaluación de riesgos.
  • Asesoramiento legal y sentencias: Ayudan a jueces y abogados para que tomen decisiones, brindando información sobre la salud mental, factores de riesgo, etc.
  • Rehabilitación y reinserción social: Trabajan con individuos dentro del sistema correccional para ayudar en su rehabilitación y preparación para la reinserción en la sociedad.
  • Contribución a la justicia: Asegurar que las decisiones legales estén basadas en hechos y evaluaciones psicológicas precisas, así los procesos son más equitativos y eficientes.

¿Cuáles son los desafíos éticos en la práctica de la psicología jurídica y forense?

Como ya se vio previamente, la psicología jurídica y forense abordan temas importantes y delicados, debido a la relación que tiene con el sistema legal, así como en demás áreas de la psicología. Estas presentan una serie de desafíos éticos para llevar adecuadamente la práctica de ambas disciplinas. Resulta útil conocer dichos desafíos y estar familiarizados con ellos para fomentar la conciencia y saber cómo abordarlo efectivamente.

Desafíos éticos

A continuación, se describen algunos de los desafíos éticos más comunes que enfrentan los psicólogos jurídicos y forenses:

  • Objetividad e imparcialidad: En ambas disciplinas se debe permanecer objetivo e imparcial al momento de realizar las evaluaciones, observaciones y testimonios profesionales. Puede llegar a ser complejo, debido a que trabajan con personas y/o situaciones delicadas, ya que están involucradas en algún tipo de delito. Para abordar esto, es fundamental ser consciente de los propios sesgos o prejuicios que uno tiene como persona. De modo que no influyan al momento de trabajar, así como ser transparente sobre lo que se puede y no se puede hacer.
  • Confidencialidad y privacidad: Así como en todas las áreas de la psicología, se tiene el deber y la responsabilidad de proteger la confidencialidad y privacidad de los clientes. Sin embargo, puede llegar a verse en conflicto cuando se vean en la necesidad de informar. Cuando hay algún riesgo de hacer algo ilegal o peligroso, ya sea para ellos mismos o para los demás. 
  • Competencia: Deben estar familiarizados con las leyes y regulaciones básicas y relevantes del lugar en donde ejercen su profesión. Para así poder realizar su trabajo lo más ético posible. Tienen la continua responsabilidad de actualizarse en técnicas de evaluación, intervención, entrevista y de lo que se utiliza en sus disciplinas, Ya que, si no lo hacen, su trabajo se puede volver inadecuado.
  • Relaciones con las partes interesadas: Es importante que sepan trabajar desde un enfoque multidisciplinario. Puede implicar un reto debido a las diferencias en las perspectivas y manejos de cada profesión, pero es importante para llevar el proceso de la mejor manera para quienes están atendiendo. 
  • Testimonio en la corte: Al momento de testificar en corte, deben procurar hacerlo claro, conciso y preciso, usando un lenguaje fácil de entender para la audiencia presente. Además de ser honestos con la información que brindan desde su conocimiento e investigación, a pesar de si es desfavorable para la parte que los contrata.

Para conocer más sobre los retos que se enfrentan al momento de ejercer la psicología jurídica y forense en México, te recomiendo ver el siguiente video:

¿Qué tipo de casos pueden abordar?

Los psicólogos jurídicos y forenses desempeñan un papel fundamental en el sistema legal, donde se aborda una amplia gama de casos que incluyen tanto el ámbito penal como el civil.

En el ámbito penal, su expertise se centra en la evaluación del acusado en diversos aspectos:

  • Competencia mental: Determinar si el acusado posee la capacidad mental para comprender los cargos en su contra y participar activamente en el proceso legal.
  • Peligrosidad: Evaluar el riesgo que representa el acusado para la sociedad en caso de ser liberado.
  • Capacidad mental: Assesment de la capacidad del acusado para tomar decisiones racionales y comprender las consecuencias de sus actos.

Adicionalmente, los psicólogos jurídicos y forenses también evalúan a las víctimas de delitos para determinar el impacto psicológico del crimen y la necesidad de tratamiento.

Su labor en el ámbito penal no se limita a la evaluación, sino que también brindan testimonios en la corte, presentando sus hallazgos y opiniones con base en su experiencia y conocimiento especializado.

En el ámbito civil, su intervención se extiende a diversos escenarios:

  • Custodia de los hijos: Evalúan a los padres y otros involucrados en casos de custodia. Proporcionando información crucial para la toma de decisiones justas y equitativas.
  • Adopciones: Determinan la aptitud psicológica de los potenciales adoptantes para garantizar el bienestar y desarrollo del niño o niña.
  • Tutela y curatela: Evalúan la capacidad de las personas para tomar decisiones y, en caso de ser necesario, recomiendan la designación de un tutor o curador.
  • Discriminación laboral: Analizan los daños emocionales sufridos por los involucrados en casos de discriminación laboral, aportando evidencia para la resolución del conflicto.

En definitiva, los psicólogos jurídicos y forenses son profesionales indispensables en el sistema legal, ofreciendo una perspectiva invaluable para la toma de decisiones justas y fundamentadas en el ámbito penal y civil.

Caso famoso en México

Con toda la información que hemos revisado sobre lo que implican ambas disciplinas, podemos percatarnos de la importancia que tienen en el sistema legal. Para resaltar dicha relevancia a continuación se presenta un caso en dónde fue crucial la participación de la psicología jurídica y la psicología forense para su resolución.

El caso del “Coque”.

El Coque fue un homicida y secuestrador mexicano en la que estuvo en la Ciudad de México durante los años 80´s. Los psicólogos forenses que participaron en el caso pudieron elaborar un perfil psicológico y un análisis del modus operandi. Lo cual ayudó a que los investigadores pudieran comprender su conducta y además enfocar su búsqueda hacia personas con esas mismas características. 

Por lo tanto, el trabajo de la psicología jurídica y forense contribuyó a que se pudiera identificar al criminal. Una vez identificado y encontrado, apoyaron en el proceso de interrogación y evaluación, obteniendo así información acerca de sus motivaciones y posibles futuras víctimas.

Este caso fue importante para ambas disciplinas de la psicología en el país de México. Ya que, demostró la gran importancia de contar con profesionales capacitados en el área psicológica, para apoyar a la investigación criminal y la justicia penal, facilitando la resolución de casos y justicia para las víctimas.

Es interesante la complejidad que hay detrás de cómo se va creando el perfil psicológico de criminales, aquí te recomiendo un video en dónde se explica más a detalle el proceso de esto:

Conclusión

En resumen, la psicología jurídica y forense son dos disciplinas fascinantes que establecen un puente entre la mente humana y el sistema legal. Si bien la importancia de la psicología en un contexto que analiza el comportamiento individual puede parecer evidente. Comprender a fondo su rol en el manejo de casos criminales, testimonios, perfilación de personalidad, evaluaciones e incluso rehabilitación de delincuentes nos brinda una perspectiva más amplia sobre la relevancia de estas áreas dentro del ámbito legal.

Al integrar las herramientas de la psicología en los procesos legales, se garantiza un desarrollo más justo, equitativo y humano de los casos, velando por el bienestar de todas las partes involucradas. Esto impacta tanto a nivel individual como en toda la sociedad, promoviendo un entorno más justo y armónico.

A medida que la sociedad y sus procesos evolucionan, los procesos legales también se vuelven más complejos. La psicología jurídica y forense, por lo tanto, adquieren una importancia aún mayor, requiriendo profesionales capacitados y comprometidos con las funciones y retos que ambas profesiones conllevan. Su labor, guiada por la búsqueda de la justicia y el bienestar de las personas, es fundamental para garantizar un sistema legal sólido y equitativo.

FAQ´S

Imagina un detective con bata blanca: el psicólogo jurídico utiliza su conocimiento de la mente y el comportamiento para ayudar a jueces, abogados y otros profesionales del derecho a tomar decisiones más justas e informadas.

Los psicólogos forenses son como CSI mentales, analizando pistas psicológicas en la escena del crimen para comprender la mente del criminal y perfilarlo. También evalúan a testigos y víctimas para garantizar la confiabilidad de su testimonio.

Para convertirse en psicólogo jurídico o forense, se necesita completar un programa de doctorado en psicología y luego obtener la licencia para ejercer la psicología en su estado. Además, hay varios programas de certificación y capacitación especializados disponibles para psicólogos que desean especializarse en psicología jurídica o forense.

  • Tribunales y sistemas judiciales
  • Instituciones penitenciarias
  • Agencias del orden público
  • Clínicas privadas
  • Organizaciones de investigación

¡Lástimamente no! La telepatía sigue siendo ciencia ficción. Sin embargo, los psicólogos pueden evaluar las capacidades mentales, la personalidad y el estado emocional de un individuo para determinar su aptitud para ser juzgado o su peligrosidad potencial.

Si bien la hipnosis puede ser una herramienta fascinante, su uso en la recuperación de recuerdos reprimidos es controvertido y no siempre confiable. La memoria es compleja y puede ser influenciada por la sugestión.

Los psicólogos analizan el lenguaje no verbal, como gestos, expresiones faciales y postura, para detectar emociones, incomodidad o posibles indicios de engaño. Sin embargo, es crucial considerar otros factores y evitar interpretaciones erróneas.

Las nuevas tecnologías como la inteligencia artificial y la realidad virtual están abriendo nuevas fronteras en la psicología jurídica. Ofreciendo herramientas para la evaluación psicológica, la simulación de escenarios y la mejora de la comunicación en el sistema judicial.